Un procedimiento disciplinario sin duda puede ser estresante, por lo que debe tener todos los hechos. Es importante que sepa qué acciones tomar, cuáles son sus derechos como empleador y cuáles son los derechos del empleado. Antes de tomar cualquier acción disciplinaria, hay ciertos pasos legales que debe tener en cuenta.
¿Qué es una audiencia disciplinaria?
Una audiencia disciplinaria, también conocida como «reunión disciplinaria», es una discusión entre un empleador y un empleado. Esta es la oportunidad en la que puede discutir la(s) alegación (s) con evidencia y escuchar al empleado.
Debe tener en cuenta que antes de una audiencia disciplinaria, debe realizar una investigación exhaustiva para recopilar todos sus hechos, ya que la mayoría de las demandas de despido injusto se reducen a una investigación deficiente.
¿Cómo me preparo para una audiencia disciplinaria?
En primer lugar, debe invitar a su empleado a la audiencia disciplinaria por escrito y esta carta debe incluir detalles de la investigación que ya ha realizado. Esto permite que su empleado se acerque a un representante, que puede ser un colega de trabajo o un representante sindical.
El período de tiempo desde el envío de la invitación a la audiencia disciplinaria real tiende a ser de 24 a 48 horas. Esto le da a su empleado tiempo suficiente para confirmar si puede o no asistir a la audiencia disciplinaria.
¿Qué sucede durante el procedimiento disciplinario?
Durante la audiencia, debe abordar cualquier regla de limpieza, como descansos cómodos y el itinerario de la reunión. Es importante que tenga un encargado de minutos para anotar lo que se discutió en la reunión o puede grabar la reunión si todas las partes están de acuerdo.
Luego debe describir la(s) alegación(s) y pedirle a su empleado su respuesta o responder cualquier pregunta relacionada con la (s) alegación (s). Si no está seguro de la respuesta de su empleado, debe investigarlos para entrar en más detalles para obtener una comprensión completa de lo que está preguntando. Al final de la reunión, debe hacerlo su empleado o su representante si tienen algo que les gustaría antes de levantar la reunión.
¿Se aplican las mismas reglas a los empleados más jóvenes?
Todos los empleados, no solo los jóvenes, tienen derecho a que un compañero de trabajo o un funcionario sindical acreditado tenga un representante en una audiencia disciplinaria.
Sin embargo, siempre aconsejamos a nuestros clientes que actúen de manera razonable. Si el empleado es inmaduro o tiene otros desafíos, le recomendamos que pueda traer a quien desee, dentro de lo razonable. Con suerte, un empleado junior traerá a un padre o tutor; en nuestra experiencia, una voz de razón adulta puede ayudar en esta situación. Si la audiencia disciplinaria puede tener un impacto en la carrera profesional de un empleado, se le debe permitir estar acompañado por un representante legal si lo desean.
Cuando se trata de celebrar audiencias disciplinarias, es imprescindible seguir un proceso justo y legal. Por lo tanto, para ayudarlo a hacerlo bien, Cathy Topp, una de nuestras Asesoras en Derecho Laboral de Recursos Humanos &, se ha acercado a la cámara para explicarle todo lo que necesita saber.