GREENVILLE, N. C. (WNCT) — Ahora nos dirigimos hacia los meses más activos de la temporada de huracanes.
Uno de los trabajos más importantes durante este tiempo es volar a las tormentas para recopilar datos. Los científicos que hacen esto son más conocidos como cazadores de huracanes.
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Hay dos agencias principales que se encargan de la caza de huracanes, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica y la Fuerza Aérea. Si bien la NOAA está más orientada a la investigación, la Fuerza Aérea trabaja directamente con el Centro Nacional de Huracanes para obtener la información más precisa y actualizada sobre un huracán.
El Mayor Jeremy DeHart, del Escuadrón 53 de Reconocimiento Meteorológico, ha estado cazando huracanes durante más de cinco años. El graduado del Estado de Carolina del Norte y autoproclamado nerd del clima habló sobre lo que hacen exactamente los cazadores de huracanes.
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«De modo que ese es el primer objetivo, decirle al NHC dónde exactamente usando coordenadas de latitud y longitud, dónde exactamente se encuentra esta tormenta en este momento», dijo DeHart. «Y volaremos lo que se llama un patrón Alfa. Empiezas en, por ejemplo, el cuadrante noroeste, vuelas a través, haces una pierna cruzada, y luego vuelas de nuevo y eso se considera un patrón alfa.
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«Y luego todo el tiempo que el avión en sí recopila datos meteorológicos, a nivel de vuelo, y luego también liberamos lo que se llama dropsondes del avión, que se liberan a nivel de vuelo y luego caen hasta la superficie midiendo la extensión vertical de la atmósfera cada vez que lo dejamos caer.»
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«No es demasiado atípico bajar algo de altitud. Bajamos unos 2,000 pies de altura en la pared del ojo, desde el paso sur a norte de la pared del ojo», dijo DeHart. «Así que una vez que realmente nos metimos en el entorno de tormenta, tuvimos que dar la vuelta por un tiempo y encontrar un parche de aire mejor para atravesar la salida.»
Pero para él, todo vale la pena.
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«Todos levantamos la mano para servir al público y, en última instancia, lo que estamos tratando de hacer es obtener los mejores datos que podamos para que el NHC pueda hacer los mejores pronósticos que puedan, lo que en última instancia reduce ese cono de incertidumbre», dijo DeHart.
Los cazadores de huracanes no solo monitorean huracanes, sino que trabajan todo el año para rastrear cosas como tormentas de nieve y ríos atmosféricos.
