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El corcho es una fantástica opción de suelo para cocinas, ya que es cómodo bajo los pies, lo que lo hace ideal para cuando necesita pasar mucho tiempo en sus pies cocinando o lavando.
Un producto natural, el corcho contiene millones de diminutas celdas de aire por centímetro cuadrado y actúa como un aislante, manteniéndose caliente bajo los pies durante el invierno. Es ligero, impermeable y hermético, además de que no absorbe el polvo, por lo que es ideal para personas alérgicas.
El corcho absorbe mejor el impacto que las superficies duras como las baldosas, lo que significa menos posibilidades de roturas si se cae un plato o un vidrio. También tiene cualidades de insonorización.
Instalación de pisos de corcho
Puede colocar baldosas de corcho con Adhesivo de contacto horizontal Selleys Kwik Grip. También necesitará cinta métrica, cuchillo de uso general, cuadrado, mazo de goma, lijadora de postes, papel abrasivo de grano 100 y 150, aplicador de piso y barniz de poliuretano.
Las baldosas de corcho deben fijarse a un subsuelo plano y liso. Asegúrese de que todas las imperfecciones, articulaciones y depresiones se llenen antes de comenzar. Mida el suelo y divídalo en cuadrantes para facilitar la colocación.
Calcule la cantidad de azulejos que necesita y corte a medida con un cuchillo de uso general y trate de cuadrar antes de comenzar. Al cortar, puntee la superficie primero, luego haga varias pasadas hasta que la baldosa se corte completamente.
Antes de comenzar el proyecto, asegúrese de que haya una ventilación adecuada en la habitación abriendo cualquier puerta o ventana.
Aplique Adhesivo de contacto horizontal Selleys Kwik Grip en la parte inferior de todas las baldosas y el suelo del primer cuadrante, superponiendo ligeramente los cuadrantes. Déjelo hasta que se seque, pero no más de 40 minutos.
Coloque la primera baldosa en la esquina del primer cuadrante y golpéela ligeramente con un mazo de goma. Asegúrese de que las baldosas estén perfectamente alineadas, ya que el adhesivo se sujeta inmediatamente al contacto y no se puede reposicionar.
Pegue la siguiente baldosa firmemente contra la primera, continuando hasta que todo el cuadrante esté cubierto. Comience en el siguiente cuadrante, aplicando adhesivo a las baldosas y el piso y espere hasta que el adhesivo se seque al tacto antes de colocar las baldosas.
Una vez que todas las baldosas estén unidas, lije el piso con un poste de lijado y papel abrasivo de grano 100, seguido de papel de grano 150. Aspire todo el piso dos veces para asegurarse de que el área esté completamente libre de polvo.
Con un aplicador de piso, aplique dos capas de barniz de poliuretano en el piso, cortando los bordes con un cepillo. Mantenga un borde húmedo y evite agrupar el acabado en un solo área. Deje que el barniz se cure durante varios días antes de usar la habitación.